
Jose Luis Walding
Abril 11, 2025
Bahréin Arde: La Fórmula 1 se desgarra entre cambios, fracasos y traiciones
El Gran Premio de Bahréin de 2025 se perfila como una contienda explosiva que podría redefinir el panorama de la Fórmula 1. Las escuderías llegan con alineaciones renovadas y expectativas elevadas, prometiendo una competencia sin precedentes.
Ferrari, con la incorporación de Lewis Hamilton, busca quebrar el dominio de Red Bull. Hamilton, tras 12 años en Mercedes, se enfrenta al reto de adaptarse rápidamente al SF-25 junto a Charles Leclerc. Mientras tanto, Red Bull, aunque mantiene a Max Verstappen, ha introducido cambios estratégicos al sustituir a Sergio Pérez por Liam Lawson y, posteriormente, por Yuki Tsunoda. Esta rotación genera dudas sobre la estabilidad y el enfoque del equipo.
McLaren y Aston Martin, aunque conservan sus alineaciones, enfrentan críticas por no evolucionar. McLaren, con Lando Norris y Oscar Piastri, ha sido acusado de estancamiento, mientras que Aston Martin, a pesar de sumar puntos, no ha logrado destacar. Fernando Alonso ha expresado su frustración por el rendimiento del AMR24, y expertos como Pedro de la Rosa sugieren que el equipo aún no ha "tirado la toalla", confiando en mejoras futuras.
La regla que obliga a los equipos a incluir pilotos novatos en las sesiones de práctica añade una capa de complejidad. Durante el primer entrenamiento libre en Bahréin, Lando Norris lideró una tabla de tiempos alterada por la presencia de múltiples reservas. Esta normativa, aunque diseñada para promover talento, ha sido vista como una distracción que diluye la competitividad.
En resumen, el Gran Premio de Bahréin de 2025 es más que una carrera; es un campo de batalla donde las estrategias audaces, los cambios de alineación y las regulaciones controvertidas podrían alterar el equilibrio de poder en la Fórmula 1.